bebe

Este es el primero de los muchos post que vamos a publicar en relación a los problemas de salud orales y la edad. Vamos a empezar por el principio que problemas pueden surgir al nacer.

Seguro que has oído en alguna ocasión la expresión “la salud bucodental no entiende de edad”. Si bien es cierto que debemos, desde que somos pequeños, mostrar especial atención al cuidado de la higiene dental y a las posibles señales que nos alertan de que algo no va bien, hay determinadas patologías que son más frecuentes conforme vamos cambiando de década.

  • Caries del biberón.Aparece cuando los bebés están demasiado

tiempo expuesto a líquidos azucarados o chupan de manera continuada objetos impregnados de azúcar (como un chupete untado de miel). Es muy importante que el bebé no se quede dormido con el biberón en la boca para reducir la exposición a los azúcares.

  • Succión digital o chuparse el dedo.Esta costumbre no es un problema de por sí, pero puede provocar consecuencias en el caso de que sea excesiva. ¡La presión que ejerce el dedo puede provocar malformaciones dentales o estructurales en su boca!
  • Dolor de la primera dentición.Este fenómeno natural posiblemente provocará molestias en las encías del bebé. La magnitud depende de su umbral del dolor, pero existen numerosos remedios que les pueden calmar, como el masaje de encías.
  • Úlceras bucales.Pueden aparecer tanto en la encía como en la mejilla del bebé debido a razones tan dispares como haber consumido un alimento muy caliente o mordeduras accidentales. ¡No te preocupes! Desaparecerán en unos días.

Problemas de salud oral frecuentes en niños de 6-7 años

  • Caries dentales.Esta patología es muy común en niños, ya que tienden a ingerir más dulces y a descuidar su higiene dental. ¡Es muy importante tratarla a tiempo! En caso contrario podríamos enfrentarnos a problemas más complejos en la edad adulta.
  • Mala oclusión dental.Puede producirse un encaje incorrecto entre los dientes superiores e inferiores, lo que puede provocar apiñamiento dental o que no puedan erupcionar adecuadamente los dientes definitivos. ¡Una mala oclusión es muy fácil de solucionar durante la infancia con un tratamiento adecuado de ortodoncia!
  • Traumatismos dentales. Los niños juegan y experimentan por el mundo, por lo que es muy común que sufran roturas dentales. Es importante acudir al dentista en el caso de un golpe, ya que las consecuencias pueden no ser apreciables a simple vista.
  • Paladar estrecho.Los dientes definitivos necesitan su espacio para poder erupcionar con normalidad. En aquellos niños que tienen un paladar demasiado estrecho como para que los dientes salgan sin problemas, se les pauta un tratamiento de ortodoncia interceptiva.