implante

Los implantes dentales son un tratamiento que requiere de un procedimiento quirúrgico para realizar una perforación en el hueso. Este procedimiento tiene un alto porcentaje de éxito, las complicaciones en el postoperatorio suelen ser poco frecuentes.

Tras la realización de una cirugía para la colocación de implantes dentales, a veces, las secuelas son mínimas, por lo que es posible que no sea necesaria la aplicación de todos los consejos que os vamos a proporcionar.

Sin embargo, en caso de duda, es importante seguir las pautas o ponerse en contacto con su clínica dental para resolver dichas dudas.

En la mayoría de los casos, habrá un sangrado mínimo, ya que la herida a menudo se cierra con suturas, se desprenden por sí solas entre 5 y 10 días después de la cirugía.

Puede darse algo de sangrado y supuración durante las primeras 24 horas. Evitar masticar, escupir o enjuagarse la boca vigorosamente o beber con una pajita durante las siguientes 24 horas tras la cirugía. Dejar que los tejidos descansen sin molestias ayuda al proceso de curación.

Desde Rubio & Dovado os recomendamos empezar a enjuagarse la boca con enjuagues de agua tibia y sal (1 cucharadita de sal en un vaso de agua tibia). Hay que continuar enjuagándose con la mezcla de agua salada aproximadamente 3 o 4 veces al día durante los próximos días después de la cirugía. También seguir cepillándose los dientes y las encías como de costumbre, excepto en el área donde se realizó la cirugía donde habrá que hacerlo suavemente y preferiblemente con un cepillo quirúrgico cuyas cerdas son muy suaves.

El día de la cirugía, la dieta debe consistir en líquidos nutritivos y alimentos blandos y fríos, como helado, yogur, etc. Es importante evitar los alimentos extremadamente calientes, los alimentos con bordes afilados como las patatas fritas o la corteza de pan, y sobre todo no masticar sobre el área de la cirugía.

La actividad física debe limitarse durante las primeras 24 a 48 horas después de la cirugía del implante dental.

Es aconsejable no fumar durante al menos 3 días después de la cirugía.

Es importante acudir a la visita de revisión postoperatoria, entre 1 y 2 semanas después del tratamiento para valorar que el proceso está evolucionando de manera adecuada.